jueves, 24 de febrero de 2011

¿Cómo recibo el perdón de Dios?

Pregunta: "¿Cómo recibo el perdón de Dios?"
Respuesta: Hechos 13:38 declara, “Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados.”
¿Qué es el perdón y por qué lo necesitamos?
La palabra “perdonar” significa hacer borrón y cuenta nueva, perdonar, cancelar una deuda. Cuando somos injustos con alguien, buscamos su perdón a fin de restituir la relación. El perdón no es otorgado debido a que la persona merezca ser perdonada. Nadie merece ser perdonado. El perdón es un acto de amor, misericordia y gracia. El perdón es una decisión de no guardar rencor a otra persona, pese a lo que le haya hecho.
La Biblia nos dice que todos necesitamos el perdón de Dios. Todos hemos cometido pecado. Eclesiastés 7:20 declara, “Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.” 1 Juan 1:8 dice, “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.” Todo pecado es a la larga un acto de rebelión en contra de Dios (Salmos 51:4). Como resultado, necesitamos desesperadamente el perdón de Dios. Si nuestros pecados no son perdonados, pasaremos la eternidad sufriendo las consecuencias de nuestros pecados (Mateo 25:46; Juan 3:36).
Perdón – ¿Cómo lo obtengo?
Afortunadamente, Dios es tierno y compasivo. ¡Está ansioso de perdonar nuestros pecados! 2 Pedro 3:9 nos dice que Dios es, “...paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” Dios desea perdonarnos, de manera que ha hecho provisión para nuestro perdón.
El único castigo justo por nuestros pecados es la muerte. La primera parte de Romanos 6:23 declara, “Porque la paga del pecado es muerte...” La muerte eterna es lo que hemos ganado por nuestros pecados. Dios, en Su plan perfecto, se hizo hombre, en la persona de Jesucristo (Juan 1:1, 14). Jesús murió en la cruz, llevando la penalidad que merecíamos – la muerte. 2 Corintios 5:21 nos enseña, “Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.” ¡Jesús murió en la cruz, llevando el castigo que merecíamos! Siendo Dios, la muerte de Jesús proveyó el perdón por los pecados del mundo entero. 1 Juan 2:2 proclama, “El es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.” Jesús resucitó, proclamando Su victoria sobre el pecado y la muerte (1 Corintios 15:1-28). Gloria a Dios, que a través de la muerte y resurrección de Jesucristo, la segunda parte de Romanos 6:23 es verdad, “...mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”
¿Quiere usted tener sus pecados perdonados? ¿Tiene un persistente sentido de culpa que no parece desaparecer? El perdón de sus pecados está disponible si usted pone su fe en Jesucristo como su Salvador. Efesios 1:7 dice, “En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia.” Jesús pagó la deuda por nosotros para que pudiéramos ser perdonados. Todo lo que usted tiene que hacer es pedirle a Dios que le perdone a través de Jesús. Si usted cree que Jesús murió para pagar por su perdón entonces ¡El lo perdonará! Juan 3:16-17 contienen este maravilloso mensaje, “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.”
Perdón - ¿Es en realidad así de fácil?
¡Sí, es así de fácil! Usted no puede ganar el perdón de Dios. No puede pagar a Dios por su perdón. Usted sólo puede recibirlo por la fe, por medio de la gracia y misericordia de Dios. Si usted desea aceptar a Jesucristo como su Salvador y recibir el perdón de Dios, aquí está una oración que usted puede hacer. Hacer esta oración o cualquier otra, no va a salvarlo. Es solamente el confiar en Jesucristo lo que le puede librar del pecado. Esta oración es simplemente una manera de expresar a Dios su fe en Él, y agradecerle por proveerle su perdón. “Dios, sé que he pecado contra ti y merezco castigo. Pero Jesucristo tomó el castigo que yo merecía, de manera que a través de la fe en Él yo pueda ser perdonado. Me aparto de mi pecado y pongo mi confianza en Ti para la salvación. ¡Gracias por Tu maravillosa gracia y perdón! En nombre de Jesús, ¡Amén!”

martes, 22 de febrero de 2011

5 características de los hijos del Reino

Somos la plenitud de Jesús, tenemos su poder y autoridad.
Efesios 1:15-23
Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
1 - Son un espíritu con Dios
1 Corintios 6:16-17
¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne. Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él.
Juan 3:3,5
Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
Cuando habla de nuevo nacimiento, no habla solo de recibir a Jesús, sino de un proceso para dar a luz una vida nueva.
Nacer de agua no es el bautismo, sino más bien un proceso de alimentación y lavamiento:
Efesios 5:25-26
Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra
Nacer del Espíritu tiene que ver con ser engendrado por Dios, no tiene que ver con algo que podamos manipular, sino que es una parte que depende de Dios, y a nosotros nos compete ser consecuentes con la obra de Dios en nosotros.
Juan 1:12-13
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.
Cuando se produce ese nuevo nacimiento, podemos ver y oír el Reino de Dios, tal y como lo hacia Jesús.
Juan 5:19-20
Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente. Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que estas le mostrará...
Juan 5:30
No puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre.
2 - Son Dependientes
Mateo 5:3
Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Pobre es "tokos" en griego, que significa mendigo, miserable, y por ende, es un dependiente. El pobre en espíritu no es dependiente de la provisión de Dios, sino más bien, dependiente del Dios de la provisión, y luego esto le faculta a recibir la provisión.
Pues como es un dependiente de Dios, busca estar cerca siempre de Dios, constituyéndose un verdadero adorador. ¿Por qué hablo de ser dependiente de Dios y no de la provisión?
Salmos 100:4
Entrad por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con alabanza...
Lugar Santo: Candelabro de oro, la mesa con los panes de la proposición y el altar donde se quemaban los perfumes e inciensos. El lugar santo tiene que ver con las cosas que Dios puede hacer por nosotros y darnos.
Lugar Santísimo: el Arca del Pacto, dentro de la cual estaban: las Tablas de la Ley, la vara de Aarón y Maná. El lugar santísimo tiene que ver con la misma personalidad y atributos de Dios, es donde mora Su gloria y majestad. Es el lugar donde realmente conocemos a Dios cara a cara.
Y la única forma de llegar es cuando lo adoramos.
Salmos 95:6
Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor.
El problema es que cuando nos acercamos a Dios, nos quedamos solo en el lugar santo, pero Dios quiere que lleguemos al lugar santísimo y hagamos morada allí. Creamos una zona de comodidad en el lugar santo, porque ahí saciamos nuestras necesidades, pero en el lugar santísimo es donde saciamos el corazón de nosotros y nos saciamos realmente.
Salmos 22:3
Pero tú eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel.
"Las alabanzas" en hebreo, incluye tanto adoración como alabanza per sé. Combinación de alabanza y adoración nos llevan a construir lugares espirituales de morada a Dios.
La adoración establece literalmente habitaciones para Dios moverse en alguna persona, lugar o nación. Establece bases legales para que la operación de Dios sea una realidad.
Salmos 91:1, 9-10
El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente. Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación, no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada...
Cuando comenzamos a habitar en el lugar santísimo, nuestro sentido de dependencia hacia Dios crece, y es ahí en donde nuestros sentidos espirituales se ejercitan, como el ver y oír a Dios y al Reino de la luz (Hebreos 5:14).
3 - Son Inconmovibles
Hebreos 12:26, 27, 28
La voz del cual conmovió entonces la tierra, pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo. (27) Y esta frase: Aún una vez, indica la remoción de las cosas movibles, como cosas hechas, para que queden las inconmovibles. (28) Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia...
(Quien hace la voluntad de Dios permanece para siempre)
Lo inconmovible es el Reino de Dios. Nosotros debemos de reflejar el carácter del reino de Dios. Y el ser inconmovible es parte de ese carácter. Nosotros no nos podemos dejar derribar ni destruir. Tenemos la capacidad de mantenernos intactos ante cualquier cosa que venga.
4 - Son Poderosos
1 Corintios 4:20
Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.
Nosotros tenemos que entender que somos cuerpo de Aquel que es la cabeza, Jesucristo. Y por ser parte que esa cabeza, heredamos las mismas propiedades que ella posee. Somos las manos y los pies de Dios aquí en la tierra. Nosotros somos la respuesta a la oración que muchos están haciendo, y si no andamos como Cristo lo desea, no podremos desplegar Su maravilloso poder.
Poder en griego es "dunamis" que significa "fuerza, poder, habilidad, poder inherente, poder para realizar milagros, poder moral y excelencia del alma, poder e influencia que le pertenecen a personas ricas y abundantes".
Ese "dunamis" viene a nosotros en la medida en que somos TRANSFORMADOS a la imagen de Jesús, y somos llenos del Espíritu Santo.
Jesús dijo que haríamos cosas mayores que las que El hizo. Jesús delegó la capacidad y el poder en nosotros, pero no lo usamos. ¿Por qué?
A - Porque no nos vemos como Dios nos ve
B - Porque no creemos que lo podemos hacer, y
C - Porque no estamos conectados plenamente con Dios.
5 - Desarrollan un vínculo perfecto
Romanos 14:17-19
Porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Porque el que en esto sirve a Cristo, agrada a Dios, y es aprobado por los hombres. Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.
Colosenses 3:12-14
Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.
Un reino dividido contra si mismo no prospera. Nosotros no hemos alcanzado nuestras comunidades porque nosotros como reino estamos divididos. Pleitos, chismes, disensiones, iras, falta de perdón y compasión, inmisericordes, y todo esto frena el mover del reino de Dios en nosotros.
Si lo igual atrae a lo igual en el mundo espiritual, lo que es diferente se repele entre si. Nosotros estamos repeliendo el mover de Dios en nuestras vidas por nuestra actitud contraria al reino de Dios.

SOS...Solo en nuestro Dios podemos confiar

Un nuevo estudio sobre los efectos del cambio climático ha determinado que el calentamiento de los océanos podría causar una inclinación del eje de la Tierra. Si bien desde hace algún tiempo se especulaba con esta posibilidad, siempre se creyó que no sería un problema que debiésemos enfrentar pronto. Pero un trabajo publicado en Geophysical Research Letters da cuenta que nuestro planeta modificaría su inclinación en el próximo siglo y que, incluso, esto podría modificar la duración del día.
Estamos acostumbrados a que la Tierra gire sobre un eje imaginario, que tiene una desviación de unos 23,5 º respecto de la vertical. A pesar de que a lo largo de nuestras cortas vidas esto siempre ha sido así, lo cierto es que esta inclinación ha ido variando a lo largo de la historia de nuestro planeta como respuesta a los cambios en la distribución de la masa en la Tierra. Felix Landerer, del Jet Propulsion Laboratory de la NASA en Pasadena, California, explica que “la Tierra es como un trompo, y si se pone más masa en un lado u otro, el eje de rotación se modifica.”
Los científicos saben desde hace tiempo que los cambios climáticos modifican de forma casi imperceptible la inclinación del eje de la Tierra. El polo norte del planeta, por ejemplo, se está desplazando lentamente en dirección hacia la línea de longitud 79 ° W, que pasa a través de Toronto y Ciudad de Panamá, a un ritmo promedio de unos 10 centímetros al año. Esto se debe principalmente a la redistribución de masas provocada por la pérdida de las capas de hielo que se encontraban sobre grandes regiones de América del Norte, Europa y Asia.
El calentamiento global origina, entre otras cosas, el derretimiento de los hielos polares. La afluencia de agua dulce, que se desprende de estos hielos antaño considerados “eternos”, también contribuye a que el planeta modifique su inclinación. Landerer y sus colegas han calculado que la fusión del hielo que cubre buena parte de Groenlandia es responsable de aproximadamente el 26% de la tasa anual del inclinamiento del eje terrestre. Además, sus modelos prevén que esta tasa aumentará significativamente en los próximos años.
El equipo de científicos calcula que los océanos, calentados por el aumento de los gases de efecto invernadero, también pueden contribuir con su granito de arena en la modificación del eje de giro de nuestro planeta. Esto se contradice con algunos estudios previos que sugerían que el crecimiento de los océanos no produciría un gran cambio en la distribución de la masa de la Tierra. Para realizar su trabajo, los investigadores construyeron un modelo basado en los cambios que se producirían si las (moderadas) proyecciones efectuadas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático —básicamente, la duplicación de los niveles de dióxido de carbono a lo largo del Siglo XXI— se convirtiese en realidad.
Los resultados muestran que, a medida que los océanos se calienten y se expandan, más subirá el nivel de los océanos, inundando las tierras bajas que rodean las grandes masas de agua terrestres. En algún momento del siglo próximo, este sutil efecto causará que el polo norte del eje de rotación de la Tierra se desplace aproximadamente 1,5 centímetros por año en la dirección de Alaska y Hawái. Será un cambio gradual. “El polo no va a alejarse de una forma loca”, señala Landerer, añadiendo que no debería producir grandes cambios en el clima de la Tierra.
“Los océanos absorben al menos el 80 por ciento del calor que provocan los gases de efecto invernadero”, explica Landerer. Maik Thomas, del Centro Alemán de Investigación de Geociencias de Potsdam, que no participó de este estudio, dice que el nuevo trabajo modifica las teorías anteriores. “Hasta ahora, la gente creía que las variaciones de nivel causados por los cambios de temperatura del océano no contribuían al movimiento de los polos, pero ahora parece que se trata de un efecto que debe ser considerado.” Thomas es cauto, y señala que es poco probable que el movimiento de los polos, a su vez, provoque otra subida del nivel del mar, desatando un fatal circulo vicioso.
Como efecto colateral, las consecuencias de esta redistribución de masas también podrían afectar a la velocidad de la rotación de la Tierra. Landerer y sus colegas demostraron la “migración de masas” hacia latitudes más altas podría provocar que el planeta gire más rápido, de la misma forma que un patinador gira más rápido cuando pone los brazos junto a su cuerpo. Si esto ocurre, dejaremos de tener días de 24 horas.

lunes, 21 de febrero de 2011

No apagues la lámpara

Conozco a muchas personas que en medio de sus oraciones, la más frecuente es: "Señor, quiero escuchar tu voz. Permíteme escuchar tu voz". Cada vez que estoy en alguna iglesia ministrando o predicando, enseño que todos nosotros somos candidatos potenciales para escuchar la voz de Dios. Escuchar la voz de Dios no tiene que ver con ser profeta o apóstol, sino con tener una relación íntima con el Señor.
Muchos quieren conocer que deben hacer para que Dios les hable, y ellos puedan escuchar la dulce voz del Maestro. Hubo una persona en la Biblia que ejercía cierto ministerio, pero que no escuchaba aún la voz de Dios. 1 Samuel 3:1 dice: "El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia".
El joven Samuel ministraba a Jehová, pero la palabra profética del Señor escaseaba, y las visiones no se daban con frecuencia. ¿No te ha pasado que en muchos momentos de tu vida, cuando más necesitas una palabra de guía de parte del Señor, no la encuentras? Es decir, quisieras por lo menos tener una visión en la que Dios te mostrara la respuesta de alguna situación, pero ni siquiera consigues eso.
En el tiempo de Samuel no habían visiones ni palabra de Dios con frecuencia. ¿Sabes por qué ocurría esto? 1 Samuel 3:3 dice: "Samuel estaba durmiendo en el templo de Jehová, donde estaba el arca de Dios; y antes que la lámpara de Dios fuese apagada..." Todo esto venía a acontecer porque la lámpara de Dios era apagada. Y tal vez tu pienses: "¿por esa sencillez no había palabra de Dios ni visión en aquel tiempo?". Pues claro que sí.
Levítico 24:1-4 dice que la lámpara puesta delante del tabernáculo se debía encender desde el anochecer hasta la mañana; y que ésto sería una orden para siempre en el templo. Lo grave del caso es que en el tiempo de Samuel, la lámpara de Dios no se mantenía encendida, sino que se dejaba que se apagara de noche. La lámpara de Dios representa Su palabra, su ley, y sus promesas.
¿Qué es lo que quiero decir con ésto? Que Salmos 119:105 dice que "lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino". Muchas personas anhelan que Dios les hable, pero no tienen una relación con la Palabra de Dios. Dejan que la lámpara del Señor se apaguen en sus vidas, y como no mantienen una relación con la Palabra del Señor, entonces la voz de Dios y las visiones escasean en sus vidas.
Tanto el sacerdote Elí, como el joven Samuel no tenían una relación con la ley de Dios, porque si así hubiera sido, habrían leido que la lámpara tenía que arder de manera continua, por siempre. El no tener un acercamiento a la ley de Dios puede costarte el oír su voz, e incluso el hecho de que Dios traiga visiones a tu vida.
Hubo dos ocasiones en que Dios llamó a Samuel, y en vez de responderle al Señor, salía corriendo hacia donde estaba Elí. Y Elí le decia que no lo había llamado, pero esto ocurría por la siguiente razón: 1 Samuel 3:7 "Y Samuel no había conocido aún a Jehová, ni la palabra de Jehová le había sido revelada". Samuel no conocía a Dios, ni su palabra le había sido revelada. Pero estamos hablando del mismo Samuel que la Biblia dice que ministraba a Dios. Ojo con esto, no siempre que alguien ministre al Señor, conoce al Señor.
Es lo mismo que no toda persona que cante al Señor, necesariamente adore al Señor. Dice en Isaías que el pueblo de aquel tiempo honraba a Dios con sus labios, pero que en sus corazones estaban apartados de Dios. Muchas veces predicamos, o hablamos lenguas, hasta ministramos y sentimos la presencia de Dios cuando oramos; pero muchas veces no conocemos al Padre como Él desea que lo conozcamos.
Y permíteme decirte algo; y es que si quieres conocer el mover de Dios, el carácter de Dios y la voluntad de Dios, entonces lee la Palabra. Estúdiala y escudríñala. Muchas personas por no conocer la Palabra de Dios, han caído en trampas de Satanás. Recuerdo en una ocasión un muchacho que con mucha sinceridad quería hacer la voluntad de Dios. y él narraba que en su búsqueda de Dios, comenzó a escuchar una voz que lo incitaba a tener relaciones sexuales con una chica. El joven preguntó a aquella voz si estaba bien, y la voz le respondió: "Claro que sí, yo soy "dios" y como eres alguien especial, para ti no es pecado tener relaciones fuera del matrimonio".
Es un caso real, y a éste joven le sucedió eso, porque si hubiera tenido una relación con las Escrituras, habría sabido que esa voz no provenía del Señor, sino de un espíritu del maligno, porque Dios no tienta ni puede ser tentado. Dios nunca te inducirá al pecado, porque Dios es un Dios de santidad, no de pecado. ¿Quieres saber verdaderamente cuando Dios te habla? Pues Dios nunca te dirá que hagas algo contrario a lo que la Biblia dice. Cuando sientas algo en tu corazón, puedes saber si proviene o no del Señor, si va conforme a la Palabra.
Cuando tú dejas de tener contacto con la Biblia, estás apagando en tu vida la lámpara de Dios, exactamente como ocurrió en el caso del joven Samuel y Elí. Antes de que Dios comience a hablar audiblemente a tu vida, o a tu corazón, tiene que venir necesiariamente una intimidad con la Biblia. Cuando Jesús fue tentado en el desierto, sucedió lo siguiente. Mateo 4:3-4 dice: "Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan. Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios".
En otras palabras, Jesús le quiso dejar dicho al diablo: "Oye, Satanás: está escrito en la palabra de Dios, que mi principal alimento es la palabra que sale de la boca de Dios". Primero se conoce la palabra escrita de Dios, y luego se recibe la palabra hablada de Dios. Primero está escrito, luego puedo escucharlo, recibirlo y aplicarlo. ¿Quieres que el Señor te hable? Pasa tiempo con la Palabra escrita de Dios, para que luego se manifieste a tu vida la Palabra hablada del Padre.
Si haces esto, te sucederá lo mismo que pasó con Samuel: 1 Samuel 3:19-21 en la Nueva Versión Internacional declara lo siguiente: "Mientras Samuel crecía, el Señor estuvo con él y confirmó todo lo que le había dicho. Y todo Israel, desde Dan hasta Berseba, se dio cuenta de que el Señor había confirmado a Samuel como su profeta. Además, el Señor siguió manifestándose en Siló; allí se revelaba a Samuel y le comunicaba su palabra".
Luego de que la palabra de Jehová escaseaba, pasó a ser abundante cuando Samuel se acercó a Dios. La Biblia al Día dice que Dios continuó dándole mensajes a Samuel y él los proclamaba delante del pueblo. Ya no habia escasez de visión ni de palabra, porque el hombre de Dios, Samuel, se adentró en una relación con Dios por medio de la palabra de Jehová.
Si quieres de ahora en adelante que la palabra del Señor fluya a tu vida, ten una relación con la Biblia. Pasa más tiempo leyendo y estudianbo la Palabra. Ora al Señor y pídele que te manifieste la palabra suya. No permitas que en tu vida se apague la lámpara del Señor en ti. En tus manos está que haya un canal de revelación desde el cielo hacia tu corazón.

sábado, 19 de febrero de 2011

La Vara de Dios

Todos conocemos la historia de Moisés y como Dios lo utilizó para liberar a su pueblo de Egipto (Éxodo, Hechos 7:20-36). Quienes no lo hayan leído en la Biblia con toda seguridad habrán visto una de las tantas repeticiones que se hacen cada año en la época de semana santa.
Dando una mirada un poco más detallada acerca de esta historia hay algo que muchas veces es pasado por alto o desapercibido, y es justamente ese el encanto que tiene.
La Biblia nos relata como Moisés pasa sus primeros cuarenta años de vida en la comodidad de palacio de faraón, de ahí es llevado al desierto donde pasa otros cuarenta años como pastor de ovejas de su suegro, aprendiendo del desierto y los siguientes cuarenta años guiando al pueblo de Dios a la tierra prometida.
En la primera etapa de su vida Moisés pudo haber tenido todo el poder y capacidad según su punto de vista para realizar una gran obra para con el pueblo de Dios, pero como siempre son muy diferentes los planes que tenemos de los planes de Dios, como siempre digo: La gran diferencia es que nosotros planeamos, suponemos, imaginamos, elucubramos, pero Dios SABE, y eso hace toda la diferencia.
Podríamos decir que estos primeros cuarenta años en su momento pueden haber sido desde el punto de vista de Moisés los mejores de su vida hasta el momento en que debe huir al desierto, justo cuando intenta hacer la obra de Dios a SU manera, sin tener en cuenta al dueño de la obra, Dios mismo.
En realidad Moisés comienza a serle útil a Dios una vez que pierde su posición y todos sus bienes en Egipto; una vez que está en el desierto comienza a ser adiestrado de una manera muy particular que por supuesto para Moisés seguramente tendría mas de incomodidad que de adiestramiento, hasta que llega a un punto en que si alguna vez pensó servir a Dios se declara totalmente incompetente.
Y es aquí donde entra en escena este personaje, silencioso instrumento de Dios.
Retomemos un poco la historia desde el momento en que Dios llama a Moisés y tratemos de ubicarnos en su posición justo en el momento en que es llamado por Dios, esta vez contra todas las predicciones. Ahora Moisés, un hombre de ochenta años, con todo su poderío y gloria pasados casi olvidados, acostumbrado a llevar una vida apacible rodeada nada más que por el desierto y sus ovejas.
Como pastor de ovejas su única herramienta era su vara o callado, a pesar de ser nada más que un palo largo sin mayor valor era lo único que le quedaba como un diario recordatorio de su nueva vida, de su nueva posición, a la vista de cualquiera no pasa de ser más que un simple y ordinario palo sin nada en especial ni mucho menos pretensión alguna, pero para Moisés, su herramienta diaria de trabajo.
En su primer encuentro con Dios, junto a la zarza ardiente (Exodo 3:4), era lo único que poseía Moisés. Ni siquiera las ovejas que cuidaba le pertenecían, eran de su suegro Jetro; si alguna vez se sintió poderoso o tuvo demasiadas posesiones, Dios se había encargado de retirarlas, no siendo más que un lastre para la misión que tendría muchos años después, ahora todo cuanto poseía era su vara, y siendo su única posesión Dios le pide que también la entregue.
Es quizás un detalle muy sutil pero justamente por eso es tan interesante, una vara en manos de un pastor no es más que un palo, pero en manos de Dios como veremos, será un instrumento poderoso y de gran significado. De igual forma mi vida en mis propias manos no es más que un número en el registro civil, pero en manos de Dios podría tomar gran significado.
En su primer encuentro con Dios, la vara que Moisés llevó diariamente durante muchos años sin darle mayor importancia más que la de una simple y ordinaria vara, ahora ya no era más la vara del pastor de ovejas, de ahora en adelante será llamada “la vara de Dios” (Exodo 4:20, 17:9), ya no seria más solamente un recordatorio de la vida diaria que había llevado durante los últimos cuarenta años, ahora además le recordaba que había tenido un encuentro personal con Dios, una muestra del poderío de Dios que llevaba en su mano.
La vara de Dios pasa desapercibida en adelante a no ser por el uso que le da Moisés en ocasiones en que debe mostrar el poder de Dios ya sea frente a Faraón y su pueblo o frente al mismo pueblo de Israel en el desierto.
Lo interesante de este objeto inanimado es que su “status” cambió radicalmente, antes era una vara más que si la pusiéramos al lado de un montón de varas a la entrada del bar de los pastores, pasaría completamente desapercibida y así mismo se sentiría (si es que pudiera sentir). Pero ahora ya no era igual, ahora era un instrumento que Moisés utilizaba cada vez que iba a demostrar el poderío de Dios. A la vista de un ojo particular, se podría pensar que el poder radicaba en la vara, más peligroso aun, la vara misma se lo pudo haber creído, pudo creer que Moisés no seria nadie sin ella, que sin la vara Moisés no podría efectuar todos los prodigios y señales que realizó y llegar a pensar que era indispensable! Gran error.
No le recuerda algo esta historia?
Cuando iniciamos nuestro caminar con Dios, una de las primeras escrituras que nos gusta recordar es Corintios, cuando se nos enseña que somos nuevas criaturas y que todas las cosas viejas pasaron (2 Cor 5:17). Aahhhh que tranquilidad y que renuevo sentimos de pensar que ya toda esa vida quedo atrás con sus errores y catástrofes! Pasa el tiempo y Dios a pesar de nosotros mismos se place en utilizarnos, dándonos dones a cada uno, ya sea de enseñanza, de predicación, de evangelismo o cualquier otro “don” que El Señor le haya dado (todos tenemos dones Efesios 4:8b). Hasta aquí las cosas van caminando y hacemos gala de humildad siempre dándole la Gloria a Dios, no dejamos nunca de orar y predicar o enseñar terminando siempre con un “en el nombre de Jesús… Amen”.
Pero!, acaso no le ha pasado por la mente en algún momento pensamientos como:
- si no fuera por mi, quien les enseñaría a estos
- si no predicara yo, no podrían entender las escrituras
- si no fuera yo quien ministro no seria lo mismo
- si no fuera por mi… yo….yo …..yo ….
Le suenan conocidos estos pensamientos? Espero que no, pero me temo que son pensamientos que no faltan a la mente de cualquier Cristiano en Construcción, ya que no son “sus” pensamientos propiamente dichos, son mas bien susurros que llegan hasta nuestros oídos por el enemigo de la obra de Dios, con un simple objetivo, hacerte menos eficiente! Así es, porque en el momento en que comenzamos a pensar que es por nuestro talento, por nuestro esfuerzo o en nuestras fuerzas que se hace la obra del reino, entonces nuestra eficiencia comienza a decaer y nuestro ego a encumbrarse como la espuma.
Es por esto que me maravillo tanto el ver el papel de la vara en la obra del Señor a través de Moisés. Hay un momento en la historia en que Dios dice a Moisés que a la vista de Faraón, el seria como un “dios” y Aaron su hermano seria su profeta (Exo 7:1). Falta algo en la escena? Y la vara?, donde queda entonces? Acaso no era ella la que portaba Moisés a todas partes desde su primera entrevista con faraón cuando fue transformada en serpiente, acaso no fue ella la que convirtió las aguas del Nilo en sangre, no fue ella la que dividió el mar rojo? No fue la que sacó agua de la piedra en el desierto? Aahh decepción mi querida vara cristiano en construcción, era apenas un instrumento y nada más.
Esa es nuestra posición en este mundo como cristianos, y no deberíamos tener mayor anhelo que ser un “Instrumento de Dios” Acaso no le basta con ello?
Piénselo bien, de todos los planetas del universo, de todas las épocas de la humanidad, de los billones de personas del planeta, Dios el creador mismo, el dueño de la tierra y sus habitantes, te ha tomado de entre ese montón de varas del desierto para que Tu mi querido hermano hagas esa parte de su obra a la que has sido llamado.

Netanyahu:¡ Israel debe “prepararse para lo peor!

El primer ministro israelí dijo que los líderes y los responsables políticos de todo el mundo deben ser alertados de los posibles peligros que puedan haber adelante. “Israel no puede profesar neutralidad sobre los hechos ocurridos, porque sobre todas las cosas, queremos que el futuro gobierno egipcio se mantenga comprometido con la paz con el Estado Judío”, expresó.
Israel comparte los deseos mundiales de que Egipto tenga éxito en su pedido de una reforma genuina, pero, a diferencia de otras democracias, no puede esperar lo mejor, sino prepararse para lo peor, según dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ayer.
Hablando en la Conferencia de las Mayores Organizaciones Judías Americanas, que se lleva anualmente en Jerusalem, Netanyahu dijo: “Parte de prepararse para lo peor es alertar a los líderes y responsables políticos de todo el mundo de los posibles peligros que puedan haber adelante, no porque los quiera materializar, no quiero, sino porque tengo la responsabilidad de hacer lo que pueda para incrementar los cambios que no se materialicen”.
Con esas palabras, el primer ministro tomó las críticas articuladas estos últimos días, más notablemente por los columnistas del New York Times, Thomas Friedman y Roger Cohen, que Israel ha estado en el lado contrario de la historia al no aplaudir los recientes eventos del Cairo.
“Nadie sabe qué traerá el futuro en Egipto. El pueblo en Washington no sabe, y la gente de Irán tampoco, e incluso, esto puede ser duro para algunos, los columnistas del The New York Times no lo saben”, destacó.
Netanyahu también dijo que mientras se cambiaba el estado a una mejor situación en Europa en 1989 con el colapso del Telón de Acero, no se podía decir lo mismo de la Revolución Rusa de 1917, o la iraní en 1979.
Incluso más recientemente, agregó, la mayor parte del mundo aplaudió la Revolución de los Cedros en el Líbano en el 2005. Pero unos pocos años después, Hezbollah, una organización terrorista que no respeta los derechos humanos, que los hace polvo, ha tomado el país.
Al final, los egipcios determinarán su propio destino, expresó el primer ministro, a lo que resaltó: “Pero Israel no puede profesar neutralidad sobre el desarrollo, porque sobre todas las cosas, queremos que el futuro gobierno egipcio se mantenga comprometido con la paz con el Estado Judío”.
Netanyahu dijo que quería que “cada egipcio” sepa que Israel está comprometido con la paz con ellos y otros vecinos del país. Dos tercios de los egipcios, cerca de 50 millones de personas, nacieron luego del acuerdo de 1979 y no recuerdan cómo era la vida antes de que se firmara el acuerdo, aseguró. “Todos los vecinos de Israel deberían valorar el acuerdo de paz de Egipto e Israel”, agregó.
“No tengo duda de que mantener la paz, profundizarla, está en el interés de Egipto, y espero que esto acompañe el esfuerzo del país de alcanzar una sociedad libre y democrática mientras buscan su reforma. Mientras esperamos que el pueblo judío tenga éxito en conseguir un nuevo futuro, no nos disculpamos por nuestro ferviente deseo de que se mantengan comprometidos con la paz”, dijo Netanyahu.
El primer ministro también dijo que en las últimas semanas se habían derrumbado un número de verdades aceptadas, incluyendo que el conflicto israelí palestino era el problema central en la región. Los cables diplomáticos americanos publicados por WikiLeaks mostraron que la principal preocupación de los gobiernos árabes no eran Israel y la Autoridad Palestina, sino Irán, mientras las protestas que sacudieron al mundo árabe mostraron que el principal problema que molesta a las masas árabes es la calidad de sus propias vidas, no el conflicto palestino-israelí.
Pero agregó: “Todavía están aquellos para quienes la centralidad del conflicto entre Israel y la AP en la región, y de hecho en el mundo, no es nada menos que un artículo de fe, y no hay evidencia de que aquellos que creen en esto no lo ignorarán. Pero muchos observadores imparciales están empezando a reconocer la realidad”.

Cruza al otro lado

Marcos 4:35 dice: "Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado". Todo día tiene una noche, y todo proceso tiene un comienzo. Muchos de ustedes sienten que ya no están en el día, sino en la noche. Noche es sinónimo de confusión, de ceguera. Es no saber en donde estoy parado, o hacia donde me dirijo. Todo día, por más espléndido que parezca, tiene una noche. Y no puede haber un proceso, si no hay un comienzo.
Y muchas veces, en esas noches que tránsitamos, es en donde comienzan las procesos. Es cuando menos lo esperas que te llegan esas circunstancias difíciles. Jesús les dijo a los discípulos: Vengan, pasemos al otro lado. El otro lado es a donde Cristo desea llevarnos, es la tierra del propósito y de la bendición. Ahora bien, desde el punto en donde te encuentras, hasta el otro lado, existe una distancia. Y al recorrido de esa distancia es que le llamamos: "proceso".
Es en el proceso en donde Dios comenzará a quitar de tu corazón aquellas cosas que desagradan al corazón del Señor. Los procesos buscan hacerte más parecido a Cristo, y menos parecido a ti; es decir, menguar nosotros, para que Cristo crezca en nosotros. Pero cuando los procesos vienen a nuestras vidas, no lo vemos de esa manera; sino que los vemos como las crisis. ¿Alguna vez has estado en una crisis de muerte?
Bueno, permíteme llevarte a los siguientes versículos de la lectura anterior. Marcos 4:35-38 dice: "Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado. Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas. Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba. Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?"
Aquí es donde está lo interesante de la historia: es Cristo quien dice que pasen al otro lado. Yo no puedo querer pasar al otro lado, sino tengo al Señor delante de mí. No puedo avanzar en ningún aspecto, si no es el Señor que va delante de mí. Yo no puedo moverme delante de la nube, sino detrás de la nube; porque cuando me muevo detrás de la nube de Dios, no importan los problemas que vengan, Dios está en control de mi vida porque estoy sometido en obediencia a Él.
Y Jesús, siendo Dios hecho carne, sabía que cuando entraran en el mar, el mar arreciaría y habría una gran tormenta. Ojo con esto, si el Maestro quiere llevarme a atravesar la tormenta, es porque Él tiene dominio y control de todas las cosas. ¿Quieres saber si verdaderamente confías en Dios? Déjate llevar hacia la tormenta. Allí es donde tu fe te salvará, o tu temor te hundirá en las aguas. Uno no sabe que tiene fe sino en los momentos difíciles. Porque cuando a uno le va bien, uno siempre tiene fe. Cuando las cosas andan mal, es ahí en donde aparece la fe.
Dice la Biblia que se levantó una gran tempestad de viento, y echaba olas en el barco, de tal manera que se estaba hundiendo; y para colmo Jesús estaba durmiendo en medio de la tormenta. Ya me imagino a Pedro pensando: "Que lindo éste, nosotros muriéndonos, y Él sin preocupaciones, durmiendo." Tal vez Andrés le diria a Pedro: "Bueno, Pedro, entiende que el Maestro estaba ministrando, es normal que esté cansado". Y posiblemente en medio de la discusión, unos cuantos discípulos se arriesgaron a despertarlo, y le dijeron: "Maestro, ¿no te importa que muramos acá mismo?"
¡Qué pregunta más linda! "Señor, ¿no te importa que muramos?". Ahora bien, lo que nos ocurre a muchos de nosotros en medio de las tormentas es que decimos con nuestros hechos o palabras, que al Señor no le importa como estemos. Algunos dicen: "Bueno Señor, tú estás en tu trono en el cielo que es perfecto, y yo estoy acá en la tierra ahogándome en los problemas. ¿Me vas a dejar morir o qué?"
Sabes, hablándote de esto siento una carga en mi corazón, es como si me dieran un golpe al corazón. Creo que así mismo se sintió Jesús al oír esas palabras. ¿Cómo te sentirías al oír esas palabras de las personas que amas? Jesús siempre tuvo cuidado de sus discípulos, en donde quiera que los llevaba, siempre los cuidaba y les daba palabra de ánimo y aliento. Y sin embargo, los apóstoles dudaron en ese momento del amor de Jesús. La tormenta les hizo dudar del amor de Dios hacia ellos.
¿Acaso las tormentas te están haciendo dudar de que Dios te ama y está contigo? Es bueno decir que Dios está conmigo cuando me va bien, pero desde que me comienza a ir mal, le pregunto al Señor que en donde se escondió, que por qué me desamparó, que donde está, etc. Cuando las tormentas te hacen dudar del amor de Dios, es porque aún no ha habido perfeccionamiento en el amor. Dile a Dios en esta hora que te ayude a nunca dudar de su amor.
Los procesos revelarán las áreas de tu corazón que necesitan ser transformadas por el Señor. Y esta tormenta en la vida de los apóstoles les estaba demostrando que habían áreas que Jesús debía de trabajar en ellos, antes de llevarlos al otro lado. No sé cual sea tu opinión, pero las tormentas en mi vida han sido necesarias para mostrarme las áreas que Dios debe trabajar conmigo.
Hay tormentas que provienen de Satanás, y debemos reprenderlas y no recibirlas. Pero cuando la tormenta proviene de Dios, podemos hacer todos los ayunos y todas las vigilias, y orar y orar, y no cesará hasta que Cristo no nos muestre cuales áreas de nosotros deben ser trabajadas.
Marcos 4:39-40 dice: "Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza. Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?"
Jesús reprendió al viento, y ordenó al mar que se callara. Reprender algo tiene que ver con el ámbito espiritual, y callar y enmudecer con lo terrenal. Muchas veces, cuando el Señor te lleve al otro lado, el diablo se levantará en contra tuya. Satanás no quiere que el propósito de Dios se cumpla en tu vida. Cuando el enemigo levante el viento en contra tuya, repréndelo. Tú tienes autoridad sobre toda fuerza de maldad. Cristo reprendió el viento; también tú puedes reprender el viento.
Y es en medio de esas tormentas en donde muchas veces se levantarán en tu contra, diciéndote que no lo lograrás, que no podrás. Ordénales que se callen, porque en tu barca está montado Jesús, el Hijo de Dios. Di a la voz del desánimo, de la tristeza, de la misera, que se callen, porque si Jesús lo hizo, también nosotros podremos, porque cosas mayores que Él haríamos, porque Él está al lado del Padre.
Termino diciendo lo siguiente: si Jesús está en tu barca, y en medio de la tormenta de tu vida, Él duerme, entonces gózate, porque significa que tienes la misma autoridad que Él tiene para callar al viento y al mar. Pero también debes saber que Él lo hará para mostrarte cuales áreas en tu corazón deben ser trabajadas. La Biblia dice que luego de esto se hizo grande bonanza. Luego que ellos vieron el poder de Dios, fueron llevados a un nuevo nivel de fe y confianza. Ésa es la grande bonanza que se hizo ese día.
No temas en cruzar al otro lado. Arriésgate a emprender nuevos proyectos, nuevas metas, a acercarte más a Dios. El Espíritu Santo quiere traer una gran bonanza sobre si.

jueves, 17 de febrero de 2011

Como está escrito sobre mí

En la pre-ciencia de Dios, el Señor ha designado un diseño de gloria para nosotros. En ese conocimento anticipado de las cosas futuras que han de venir, Dios el Padre ha visto y preparado de antemano buenas obras para nosotros.
Hay diseños de luz que el Señor ha preparado sobre nuestras vidas, para que de acuerdo a esos planes andemos hasta llegar al lugar de conquista.
En Hebreos 10:5-7 dice: "Por lo cual, entrando en el mundo dice: sacrificio y ofrenda no quisiste; mas me preparaste cuerpo. Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como en el rollo del libro está escrito de mí."
Yo quiero que tú entiendas algo, y es que el Padre no está interesado en un sacrificio que hagamos por obligación, sino por obediencia. Dios nos preparó un cuerpo, nos preparó un camino nuevo y vivo para que caminásemos sobre él, pero el Señor no espera de nosotros que lo hagamos de manera obligada.
Dios no está interesado en que cuando estemos en la iglesia, y el pastor diga que es hora de diezmar y ofrendar, lo hagamos para agradar al ojo del hombre. Porque si lo hacemos con esa mentalidad, nuestra ofrenda posiblemente sea recibida en la iglesia, pero no será recibida en los cielos.
¿Sabías que llegó un momento en donde Dios se cansó del sacrificio y el holocausto? Porque se perdió la esencia del mismo, y en vez de ofrecerse como un acto de reconocimiento a la santidad de Dios, y que solamente El nos santificaba, pasó a hacerse de manera religiosa, al igual que un hecho repetido que carecía de significado.
Y muchas veces nosotros hacemos la voluntad de Dios más por temor a ser castigados que por amor al Señor. Cuando hacemos la voluntad de Dios por miedo al castigo, no estamos siendo obedientes sino que estamos siendo manipulados y sujetados a la servidumbre del temor.
Porque obediencia sin amor es sujeción al temor. A Dios no le interesa que le obedezcamos por temor, sino por amor. Dios recompensa nuestra obediencia.
El pasaje de Hebreos habla de cuando Cristo entró a la tierra a cumplir la voluntad de Dios. Cristo vió que el ritualismo no complacía al Padre, y entonces dijo: "Mi Dios, vengo para hacer tu voluntad, como está escrito en tu libro sobre mí".
Es como si estuviera diciendo: "Sacrificio y ofrenda no quisiste, pero cuando me decido y hago tu voluntad, eso es lo que te agrada". Cuando espontáneamente yo decido entregarme como un sacrificio vivo y santo, cuando mi ofrenda no es nada que yo pueda entregar sino mi propia vida sujetada a la obediencia a Cristo, entonces estoy agradando al Padre.
El autor de Hebreos está citando Salmos 40:6-8, que declara lo siguiente: "Sacrificio y ofrenda no te agrada; has abierto mis oídos; holocausto y expiación no has demandado. Entonces dije: he aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito de mí; el hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de mi corazón."
La Nueva Versión Internacional dice: "A ti no te complacen sacrificios ni ofrendas, pero me has hecho obediente..." (Salmos 40:6 NVI). ¿Sabes cuando Dios nos hace obedientes? Cuando llevamos Su ley dentro de nosotros. Cuando Su palabra habita en nuestros corazones.
Tienes que entender que en el libro de Dios está escrito tu nombre, con un diseño tremendo para tu vida. Cuando caminas en obediencia a Dios, estás atrayendo ese diseño y el cumplimiento del mismo. "Como está escrito en el rollo sobre mí, así haré. Como el rollo del Señor lo declara, así lo haré".
Cuando entiendes lo que está escrito en el rollo sobre ti, es cuando decides hacer cumplir esas palabras sobre tu vida. Por eso Cristo dice en el Padre nuestro: "Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así sea hecha en la tierra". Porque cuando decimos "venga tu reino" estamos declarando sobre nosotros que no queremos gobernarnos a nosotros mismos, sino que sea el Señor que gobierne nuestro caminar.
Y cuando decimos "hágase tu voluntad, como en el cielo, así sea hecha en la tierra", estamos diciendo que queremos que los diseños celestiales desciendan sobre nuestras vidas.
Cuando viene un pleno entendimiento de que la voluntad de Dios es buena y perfecta, entonces ya no obedeces por temor, sino por amor a Aquel que te llamó a caminar sobre buenos caminos y sobre buenas tierras. Cuando comprendes que hay algo grande preparado para ti, algo mejor y más excelente, entonces la obediencia se te hace fácil, porque confías en Dios.
Pero todo esto viene cuando el rollo del Señor está en tu corazón. Viene cuando la palabra de Dios y el fruto del Espíritu están en tu corazón. Y para lograr esto debemos hacer lo que dice Hebreos 10:8-9: "Diciendo primero: sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley), y diciendo luego: he aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último".
Luego de que viene la obediencia, debo quitar lo primero para establecer lo último. Debo quitar mi voluntad, para establecer la voluntad de Dios en mi vida. Debo quitar la mentira, para establecer la verdad de Dios. Debo quitar la ira, para establecer la mansedumbre del Señor.
A nosotros nos toca obedecer, quitando las cosas primeras, para establecer las últimas. Nos toca hacer morir la carne yendo voluntariamente a la cruz de Cristo, para que la vida nueva de Jesús se manifieste en nosotros. Debemos dejar que Dios quite lo viejo, y que ponga lo nuevo en nosotros. Debemos permitirle al Espíritu que quite lo viejo, y establezca el nuevo orden de Dios en nosotros.
Nuestra oración debe ser: "Señor, quita lo viejo, y pon lo nuevo. Quita lo viejo, y establece lo nuevo. Llévate al viejo hombre, y establece al nuevo hombre. Llévate la vieja mujer, y establece la nueva mujer conforme al diseño de Cristo. Quita lo que no sirve, y pon en mi lo que sí sirve, que proviene de tu reino. Quita la inmundicia, y pon la santidad".
En el rollo del Señor está escrito sobre nosotros. En el libro del Señor están las palabras proféticas sobre nuestras vidas, y nosotros somos los encargados de hacer que esas palabras se cumplan sobre nosotros. Oye, hay una obra nueva que Dios quiere relizar sobre tu vida, sobre tu familia, sobre tu negocio, sobre tu ministerio, y solo depende de una entrega en obediencia que ejecutes en esta hora.
Cuando hacer la voluntad de Dios te agrada, el rollo se desenvuelve sobre tu vida, trayendo luz de los planes de Dios para tu diario andar. Esta es la palabra que tengo hoy para ti: cosas nuevas quiere el Señor hacer contigo. Escudriña el corazón de Dios, busca su rollo y entenderás cual es el diseño para ti.
Algo grande está a punto de ocurrir en tu vida.

El silbo apacible (I)

1 Reyes 19:1-13 dice:
"Acab dio a Jezabel la nueva de todo lo que Elías había hecho, y de cómo había matado a espada a todos los profetas. Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero, diciendo: Así me hagan los dioses, y aun me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de ellos. Viendo, pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está en Judá, y dejó allí a su criado. Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres. Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó, y le dijo: Levántate, come. Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse. Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta. Se levantó, pues, y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios. Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías? El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida. El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto. Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado. Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías?..."
Este mensaje se llama: "La necesidad del silbo apacible". O sea, muchas veces hemos oido esta expresión, pero ¿qué es en realidad el silbo apacible? Estos pasajes de 1 Reyes 19 nos hablan de 4 formas de Dios moverse en nuestras vidas, con nosotros, y a traves de nosotros.
¿Quien era Elías? 1 Reyes 17:1 dice: "Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad...". Elías fue un profeta en un tiempo decisivo en donde la incertidumbre reinaba en Israel y se encontraba en una situacion en donde el pueblo de Israel no sabia si seguir a Dios, o a Baal".
El nombre de Elias significa: "Dios es Jehová" ó "Mi Dios es Jehová". El llamado de Elias era reestablecer de manera definitiva el culto a Dios antes que el culto a Baal. Nosotros como cristianos estamos llamados a quitar el culto a Baal de las mentes y corazones de las personas. Baal representa todo aquello que no es Dios.
La Biblia dice que Elias era tisbita, es decir, de una ciudad llamada Tisbet. ¿Saben que significa? Tisbita significa "recurso". Elias era el recurso del Señor en ese tiempo para establecer la voluntad de Dios y ustedes y yo somos el recurso de Dios en este tiempo para establecer el reino de Dios a nuestro alrededor.
Elias confronta a los profetas de Baal, matándolos a todos; pero cuando la reina Jezabel se entera de esto, amenaza a Elias con matarlo, y Elias huye. Muchas personas dicen que Elias se acorbadó, porque huyó de una mujer. Permíteme decirte que Elias no huyó de la mujer... sino del espíritu que operaba detras de ella. ¿Cuántas veces hemos huimos, o permitimos que Satanás haga su voluntad a nuestro alrededor?
Yo no sé que Elías estaba pensando en ese momento, pero te puedo decir que Elías tenia un pasado que queria ser marcado por la derrota. ¿Por que lo digo? Elías era tisbita, de los moradores de Galaad. ¿Sabes que significa Galaad? El pacto destruido ó el montón de ruinas del pacto. Es fuerte tratar de avanzar cuando hay un pasado que te persigue. Es duro querer seguir adelante cuando hay voces que te dicen: "Galaad"; es decir, que tu pacto fue destruido, que eres indigno, que no mereces estar al lado de Dios.
Elías era el recurso de Dios, pero este recurso de Dios venia de un sitio en donde no había pacto con Dios. Elías huyó atemorizado. Por eso yo digo que después de una gran victoria, el diablo tratará de traerte una gran derrota, para opacar la obra de Dios en tu vida.
El camino hacia Beerseba
1 Reyes 19:3
Viendo, pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está en Judá, y dejó allí a su criado".
Dice que Elias huyó a Beerseba de Judá para salvar su vida, y dejó alli a su criado.
¿Por que Elías huye hacia Beerseba? Beerseba significa pozo del juramento (pacto), porque allí Abraham hizo un pacto con un filisteo en esa tierra. Abraham le dió 7 corderas a Abimelec (Génesis 21:27-33) en señal de pacto, invocó el nombre de Dios, y plantó un arbol tamarisco. Este árbol es simbolo de la provision de Dios y las 7 corderas es simbolo de redención de pecados. Así que Beerseba es simbolo de pacto con Dios, de perdón de pecados, y de provision física.
Sin embargo, Elías parte de Beerseba, dejando allí a su criado. Un criado es un sirviente adolescente. Dejar a su criado atras era símbolo de dejar la actitud infantil detrás. Muchas veces queremos avanzar en los de Dios, pero somos ñoños muchas veces. Tenemos actitudes infantiles que no nos dejan avanzar hacia el propósito de Dios. ¿Recuerdan cuando Elías iba a ser arrebatado? Eliseo nunca se le quiso despegar a Elías; porque Eliseo era el sucesor de parte de Dios para Elías.
Elías no se pudo deshacer de Eliseo, porque por más que trates huir de lo de Dios, esto se pegará de ti y no te soltará. Dios no te dejará hasta que haga contigo lo que El dijo desde los cielos que haría en tu vida. No importa lo grande o pequeño que sea, Dios jamás faltará en cumplir una buena palabra suya en tu vida. Sin embargo, debemos dejar atrás lo que no produzca bendición en nuestras vidas, aquellas actitudes inmaduras que solo nos llevan al distanciamiento de Dios.
Elías sigue su camino, y llegando al desierto, se tira de bajo de un arbusto deseando morirse. ¿Y cuántas veces no hemos sentido que nuestros sueños se estan muriendo; que nuestras esperanzas van a morir? Sentimos que ya no hay razón para luchar, porque como quiera vamos a fracasar; cuando vienen esos deseos de tirarnos en el suelo y no hacer nada, solo esperando lo que creemos que es inevitable.

El camino hacia Horeb
Dios envia un ángel que alimenta a Elías, y le insta a seguir. Elías caminó 40 dias y 40 noches, y llegó a Horeb, el monte de Dios, en donde Dios le tenia una sorpresita preparada a Elías. ¿Ustedes nunca se han preguntado por qué Horeb es el monte de Dios? La palabra Horeb signfica desolado, solitario, destruido. Con razón es el monte de Dios, porque El destruye tu vieja naturaleza, la borra de tu memoria, para que El pueda levantar Su gloria en tu vida.
Horeb es simbolo del trato de Dios en nuestras vidas, en donde Dios se encarga de quitar lo que somos, de destruir el ego y las fortalezas mentales, para levantar a un Cristo de gloria en nosotros.
Elías debía ir a Horeb a recibir el trato de Dios, no a Beerseba para salvar su vida. Beerseba era un lugar de invocación y pacto, en donde fluía el perdón de Dios y la provisión. Pero Elías no necesitaba el perdón de pecados ni provisión física. Elías necesitaba la guía de Dios que estaba en Horeb.
Y muchas veces la solución a nuestras circunstancias no está en decirle a Dios que nos cumpla las promesas (Beerseba), sino en ir a su monte para recibir la dirección correcta que nuestras vidas necesitan (Horeb).
Aclaro algo: ir a Beerseba no es malo. Lo que sí es malo es cuando sustentas tu condición en una promesa, y no en el Dios que te da la promesa; o sea, cuando caminas detrás de la bendición, y no detrás de Aquel que es quien nos bendice.
Elias llega a Horeb, y lo que hace es que entra en una cueva.
1 Reyes 19:9-10
"Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías? El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida".
Señores, seamos justos: Elías expone su argumento de por qué huyó. No queria morir. Nadie quiere morir; pero Dios le responde en 1 Reyes 19:11, diciéndole: "El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová...".
Aquí entramos en materia. Dios le dice a Elías que salga, pero antes de Elías salir, pasan 4 fenómenos interesantes.
1 Reyes 19:11-13
"El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto. Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado. Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva..."
Aquí vemos 4 operaciones diferentes de Dios:
1 - Viento grande y poderoso
2 - Terremoto
3 - Fuego
4 - Silbo apacible y delicado
Ahora bien, repito la pregunta del principio: ¿qué es el silbo apacible? Antes de responder que es el silbo apacible, debemos saber qué es el mover del viento grande y poderoso, el terremoto y el fuego.

El silbo apacible (II)

1 - Viento grande y poderoso
1 Reyes 19:11
El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas...
Las veces que yo había leido este pasaje, nunca me había detenido en que no solamente era un viento grande y poderoso, sino que al mismo tiempo este viento rompía los montes y quebraba las peñas. Había una manifestación tan poderosa del mover de Dios que los montes eran destruidos.
El mover del viento poderoso tiene que ver con el proceso en el cual Dios nos introduce para quitar la dureza de nuestros corazones. Ezequiel 36:26 dice: "Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne".
Es necesario que el viento del Espíritu de Dios destruya las rocas de tu corazón; que quite la dureza de tu corazón. Muchas veces Dios se ve en la necesidad de quitar la dureza que brota en nuestros corazones por la incredulidad, por el pecado, por la rebeldía y la desobediencia.
El viento violento del Espíritu viene a transformar tu corazón, derrumbando y quitando las piedras que en ti se forman. Por eso muchas veces Dios nos habla o trata con nosotros de una manera tan violenta, y es para destruir la dureza de nuestro interior y para cambiar tu interior.
Este viento grande y poderoso es el mismo que se describe en Hechos 2:2 en el original griego; cuando el Espíritu Santo llega en pentecostés con un estruendo y viento recio. Ese día el Espíritu Santo llegó arrebatando violentamente a los presentes aquel dia, para destruir sus viejas naturalezas, y para reedificar una vida nueva en ellos.
Sin embargo, Elías no sale de la cueva. A mi no me gusta especular, pero yo pienso que Elías no salió porque identificó en su espíritu el mover de Dios, y dijo: "No, yo no tengo dureza en mi corazón. Aún no debo salir, ese no es mi proceso". Y Elías permanece en la cueva aún.
2 - Terremoto
1 Reyes 19:11
"Y tras el viento un terremoto..."
Luego que el viento poderoso pasara, vino un terremoto. El mover del terremoto de Dios tiene 3 apliaciones.
Hechos 16:26
"Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron".
Pablo y Silas estaban encarcelados, y de repente, Dios envia un terremoto que abre las puertas de la cárcel, y soltando sus cadenas. El mover del terremoto tiene que ver con sacudir los cimientos y con traer libertad. Tiene que ver con producir liberación en una vida que se encuentra cautiva almática o espiritualmente.
La segunda aplicación del terremoto se encuentra en Mateo 27:54, en donce dice: "El centurión, y los que estaban con él guardando a Jesús, visto el terremoto, y las cosas que habían sido hechas, temieron en gran manera, y dijeron: Verdaderamente éste era Hijo de Dios".
Luego de que el centurión viera el terremoto y las otras señales, entendió que Cristo era el Hijo de Dios; ya que el mover del terremoto también tiene que ver con quitar las fortalezas y las lagunas mentales. El terremoto de Dios te quita las vendas de los ojos, para que tu visión se amplifique.
Hay personas que no ven mas allá por los prejuicios y fortalezas que tienen en sus mentes, y Dios tiene que traer un terremoto a sus vidas para darles a entender que las cosas no son como ellos la ven, sino como los cieloa las están viendo.
Hasta que el centurión no experimentó el terremoto de Dios en su vida, no entendió que Jesús era el Cristo. Hasta que no experimentemos el terremoto de Dios en nosotros, muchas fortalezas y errores no serán quitadas de nuestras mentes.
Y la tercera aplicación se encuentra descrita en Amós 1:1 y Zacarías 14:5
Amós 1:1
"Las palabras de Amós, que fue uno de los pastores de Tecoa, que profetizó acerca de Israel en días de Uzías rey de Judá y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto".
Zacarías 14:5
"Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá..."
La Biblia no ofrece más datos sobre este terremoto, pero la historia dice que ocurrió entre los años 763-760 antes de Cristo. Este terremoto marcó un "antes" y un "después" en la Biblia. El mover de Dios viene para marcar tu vida. Viene para hacer una diferencia clara, de modo que en tu vida haya un "antes" del mover de Dios y un "después" del mover de Dios en tu vida.
Pero Elías no sale de la cueva aún. Imagino a Elías diciendo: "Señor, es que yo no necesito que me liberes de una cárcel de mi alma o de mi espíritu. No necesito que quites ningún prejuicio de mi mente o venda de mis ojos; y mucho menos necesito una marca, porque ya la tengo. Ese no es mi mover aún...".
3 - Fuego
1 Reyes 19:12
"Y tras el terremoto un fuego..."
El mover del fuego tiene diferente dimensiones y maneras de operar. La primera la encontramos en Salmos 78:14, donde dice: "Les guió de día con nube, y toda la noche con resplandor de fuego". El fuego tiene que ver con la guía de Dios en tu vida. Tiene que ver con un trato íntimo de Dios que produzca dirección en tus caminos.
Un ejemplo de esto es cuando Dios se le manifestó a Moisés en el fuego de la zarza ardiente. A través de esa señal, Dios le ministró guía y dirección a Moisés. Muchas veces nos encontramos en procesos en donde es necesario que venga la mano de Dios para dirigirnos y terminemos con bien el camino por donde transitamos.
La segunda operación del mover del fuego está en 1 Pedro 4:12, donde dice: "Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido". La prueba sirve para purificarnos, así como el fuego purifica al oro. Sirve para llevarnos a parecernos mas a Cristo, y menos a nosotros.
La tercera operación la encontramos en Jeremías 23:29, y dice así: "¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra?". El fuego de Dios moldear nuestro caracter, sirve para quitar las asperezas de nuestro corazón, y confronta lo que somos y lo que hacemos.
Otra operación de este mover está en Marcos 9:49, en la Nueva Versión Internacional: "La sal con que todos serán sazonados es el fuego". La sal se usa para preservar. El mover del fuego sirve para preservar la identidad de Dios en nosotros. Muchas veces el Señor nos procesa, y queremos volver atrás. Entonces Dios deja caer fuego del cielo para que actúe como sal en nosotros, y preserve su caracter en nosotros.
Por último, el fuego de Dios sirve para corregirnos y reprendernos (Isaías 66:15). Muchas veces Dios no aprueba nuestras conductas y se ve en la necesidad, como Padre nuestro que es, de corregirnos y hasta castigarnos. Esta es una parte dificil de entender del corazón de Dios, pero no debemos olvidar que como todo padre que ama a su hijo y lo corrige por amor, Dios hace lo mismo con nosotros.
Y la corrección de Dios duele muchas veces, de la misma manera que el fuego quema y duele. Pero debemos comprender que Dios lo hace por amor de nosotros.
Aún así, Elías no sale de la cueva. Elías no necesitaba que se le corrigiese nada malo. Tampoco necesitaba purificación porque no estaba en pecado. Ya él era un profeta fino, y no necesitaba ser afinado más.
4 - Silbo apacible y delicado
1 Reyes 19:12-13
"Y tras el fuego un silbo apacible y delicado. Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva..."
Cuando Elías escucha este silbo apacible, cubre su rostro y sale de la cueva. Este era el mover de Dios que Elías estaba esperando. La operación del silbo apacible y sus características se encuentran en los siguientes versículos.
1 Reyes 19:13,15-18
"Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías? Y le dio Jehová: Ve, vuélvete por tu camino, por el desierto de Damasco; y llegarás, y ungirás a Hazael por rey de Siria. A Jehú hijo de Nimsi ungirás por rey sobre Israel; y a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, ungirás para que sea profeta en tu lugar. Y el que escapare de la espada de Hazael, Jehú lo matará; y el que escapare de la espada de Jehú, Eliseo lo matará. Y yo haré que queden en Israel siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal, y cuyas bocas no lo besaron".
El silbo apacible contiene las siguientes características:
1 - Guía:
"Ve, vuélvete por tu camino..."
El silbo apacible se caracteriza por la guia de Dios sobre tu vida en esas circunstancias en donde no sabes que decir o que hacer. Esta guía es el rescate de Dios en aquellos momentos en donde la confusión reina en nuestras vidas.
2 - Dirección con ciencia:
"...por el desierto de Damasco..."
La guía de Dios es lo que debes hacer. La dirección de Dios es cómo debes hacer aquello a lo que Dios te manda. En el silbo apacible Dios te revela estrategias de guerra, estrategias para vencer las situaciones por las que estás atravesando, y lo hace de una manera detallada, precisa y concisa.
3 - Acción:
"...y ungirás..."
En el silbo apacible es donde Dios te ministra cuales métodos o acciones utilizar para vencer, para salir de alguna situación, o para orientar a otra persona más.
4 - Propósito:
"...y el que escapare de la espada... lo matará..."
Dios no solamente te dice que ejecutes alguna acción, sino que también te revela el propósito de dicha acción. Lo mismo pasó con Elías, ya que el propósito de todo esto era destronar a Jezabel y continuar la línea profética en Israel.
5 - Descanso:
"Yo haré que queden..."
La carga de Elías era que solo él había quedado fiel en Israel. Dios le ministró que El se habia reservado un remanente fiel a Dios, que no se habian inclinado ante Baal. Muchas veces cuando Dios lleva ese mover de quietud en una iglesia, lo llamamos silbo apacible. Y si bien eso forma parte del silbo apacible, no se queda solamente ahí. Hay muchas características más de un verdadero mover de silbo apacible, a parte del descanso.
6 - Nuevas fuerzas:
"Partiendo él de allí..."
Luego de que Dios se moviera ante Elías de manera apacible, trayendole guia, dirección, acción y propósito, y luego descanso, Elías obtuvo nuevas fuerzas para seguir hacia adelante y hacer todo lo que Dios le habia mandado.
Y por eso es que Dios nos hace una invitación hoy, diciéndonos: "Yo entiendo por lo que estás pasando, aunque tú no entiendas. Por eso ven a mi monte, ven a mí. Yo te haré entender y te haré conocer como yo conozco, y verás que siempre Yo tuve el control".
¿En qué parte del proceso te encuentras? ¿Necesitas el viento de Dios en tu corazón, el terremoto, el fuego, o el silbo apacible? ¿Cuáles áreas en tu vida necesitan de la mano de Dios? Saber esto puede llevarte a conocer la dimensión del trato del Padre con tu vida.
Dios nos está invitando a Horeb, a un encuentro con El, para recibir el trato directo del Señor en nuestras vidas. Hoy es un dia en donde se producirán cambios en nosotros.

sábado, 12 de febrero de 2011

Señales antes de la venida de Cristo: Por que Cristo puede venir hoy

Cinco eventos clave que deben ocurrir antes de que se produzca la venida del Señor.
Número uno: La restauración de Israel como territorio, un pueblo y una nación (Jeremías 16:15, 30:1-3 y otros). En Mateo 24:32-36, el Señor declara que podemos reconocer las señales del fin al observar a la nación de Israel, simbolizada en las Escrituras por el árbol de la higuera (Joel 1:7, Oseas 9:10). El Señor Jesús dijo que cuando el árbol de la higuera saque hojas frescas esa generación no pasará hasta que todo se cumpla. El árbol de higuera floreció en 1948 cuando Israel se transformó en una nación, así que sabemos que estamos cerca del regreso del Señor Jesucristo.
Número dos: Rusia se levanta como poder mundial (Ezequiel 38:3-9).
Número tres:
A) El nacimiento de un nuevo súper poder en Europa.
B) Después del rapto de la Iglesia, se levantará un hombre llamado el anticristo el cual la Biblia describe en Daniel, capítulos 2, 7, 8 y 11 y también en Apocalipsis capítulos 12 y 13.
Número cuatro: Aumento de la ausencia de leyes en el mundo (1 Timoteo 4:1). Abundará la iniquidad y las manifestaciones demoníacas en intensidad (Mateo 24:1-13).
Número cinco: Un asombroso mover de Dios. El más glorioso mover del Espíritu Santo en la historia del mundo ocurrirá justo antes del rapto (Mateo 24:14, Hechos 3:24).
Algunos de estos eventos han sucedido ya, y ahora esperamos el cumplimiento del resto. Pero, usted debe recordar que el Señor claramente declara en Lucas 21:36 que aquellos creyentes que vivan delante de Él en santidad no pasarán por la Gran Tribulación. "Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán y de estar en pie delante del Hijo del Hombre".
¿Por que el Señor nos diría que nos preparemos para escapar si no fuera a suceder?
Creo con todo mi corazón, basado en la Palabra de Dios, que usted y yo no pasaremos la Gran Tribulación. La Biblia también revela que Dios no ha llamado a su pueblo a ira.
"Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo que murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con Él" (1 Tesalonicenses 5:9-10)
El Señor dijo que si íbamos a vivir una vida que le agradara a Él, nos guardaría de la hora de la tentación (tribulación) que viene sobre el mundo: "Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra. He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona" (Apocalipsis 3:10-11).
En 1 Tesalonicenses 4:13-18, el regreso de Jesús se describe en detalle. Los muertos en Cristo se levantarán primero, luego los que estén vivos serán arrebatados en las nubes con ellos para encontrar al Señor en el aire, esto es lo que me gusta llamar "¡El gran escape!" No estará aquí para la Gran Tribulación. ¡Se habrá ido! En 2 Tesalonicenses 2:1-8, el apóstol Pablo nos previene que no estemos preocupados por las cosas que vendrán sobre la Tierra, la iniquidad, el surgimiento del anticristo, y los tiempos peligrosos ¡porque no estaremos aquí!
En 1 Corintios 15:50-53, conocemos detalles referentes al rapto que incluyen el hecho de que ocurrirá "en un abrir y cerrar de ojos". Los científicos de la General Electric han medido el parpadeo de un ojo humano y descubrieron que es 11/100 de segundo. ¡Así de rápido nos habremos ido!
Agregado a estas Escrituras del Nuevo Testamento, el registro del Antiguo Testamento confirma cómo Dios liberó a su pueblo del juicio. Cuando Dios envió plagas sobre los egipcios, Israel fue salvado (Éxodo 5-12). Cuando Dios destruyó Sodoma y Gomorra, Lot fue salvado. El ángel le dijo a Lot que Dios no podía enviar juicio hasta que Lot estuviera fuera de la ciudad (Génesis 19:22).
Dios recordaba las oraciones de Abraham y liberó a Lot (Génesis 19:29). En los tiempos peligrosos que vendrán sobre esta Tierra, ¿no cree que Dios le recordará y le librará a usted y los suyos que lo conocen a Él? Si Dios salvó a Israel, que caminó bajo la ley en el Antiguo Pacto, ¿cuánto más lo salvará a usted y a mí que caminamos bajo la Gracia? ¡Todo lo que usted y yo necesitamos hacer es permanecer en Él! "Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste, tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados" (1 Juan 2:28).
Permanecer significa caminar con Dios en forma diaria. Si hace esto, permanecerá fuerte en su caminar con Dios y recibirá una recompensa completa cuando Cristo regrese: "Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo, sino que recibáis galardón completo" (2 Juan 8). Y no olvide que Él nos ha prometido a usted y a mí que puede mantenernos de caída y presentarnos delante del trono con gozo. "Y Aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría..." (Judas 24).
Jesús regresa pronto, retén lo que tienes (Apocalipsis 3:11). ¡No lo pierdas! La más grandiosa huida de la historia del mundo está ya casi sobre nosotros, así que entrégate a Él porque prometió que nunca nos dejaría ni abandonaría (Hebreos 13:5).

jueves, 10 de febrero de 2011

COMO SER SABIOS ANTE LOS OJOS DE DIOS

Uno de los pasajes más preciosos del Evangelio... y tal vez uno de los menos aprovechados, es aquella oración con que Jesús clamaba así al Padre Celestial: “¡Te doy gracias, Padre, Señor del Cielo y de la Tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien.” (Mt. 11, 25)
Sí, al Padre le ha parecido bien esconder las cosas de su Reino -esconder su Sabiduría- a los sabios, a los cultos, a los racionalistas, a los que no creen en nada que no sea comprobable, a los que necesitan “ver para creer”. Y sí se las ha revelado a la gente sencilla, a los que creen no saber mucho o tal vez no saber nada, a los que están prestos a ser enseñados por el Espíritu Santo, a los que saben que nada saben que no les venga de Dios, a los que saben que nada son ante Dios. A ésos sí les revela el Padre sus secretos.
Conocida esta oración del Señor, no sorprende, entonces, que  Pablo, dirigiéndose a los griegos, quienes se dedicaban con mucho ahínco a la búsqueda del saber humano, les dijera esto: “Si entre ustedes alguno se considera sabio, según los criterios de este mundo, considérese que no sabe, y llegará a ser verdadero sabio. Pues la sabiduría de ese mundo es necedad a los ojos de Dios”. Y luego pasa a citar frases del Antiguo Testamento: “Dios atrapa a los sabios en su propia sabiduría ... El Señor conoce las razones de los sabios, y sabe que no valen nada”. (1 Cor. 3,18-20).
¡Qué distinto ve Dios las cosas a como las vemos nosotros los humanos! ... Si alguno quiere ser sabio, que se reconozca incapaz de saber y de conocer por sí solo, que se reconozca insuficiente, que sepa que nada puede por su cuenta, porque ... querámoslo reconocer o no ... nada puede el hombre por sí solo. En esto consiste la “pobreza de espíritu”. Sólo los sencillos, los “pobres de espíritu” podrán conocer la verdadera “Sabiduría” -aquélla que viene de Dios. Esa “Sabiduría” (con “S” mayúscula) es la que hace ver las cosas a los ojos de Dios, la que hace ver las cosas como Dios las ve.
Pequeñez, sencillez, humildad. Son virtudes evangélicas necesarísimas, que nos llevan a ser pobres en el espíritu. Pero ¡qué lejanas están estas virtudes de lo que nuestro mundo actual -tan distinto de Dios- nos propone!
Ante la pequeñez espiritual del Evangelio, se nos propone el engrandecimiento del propio yo. Ante la sencillez del Evangelio, se nos proponen los racionalismos estériles. Ante la humildad del Evangelio, se nos propone la soberbia de creer que se puede lograr cualquier cosa con tan sólo proponérsela. Ante la pobreza en el espíritu del Evangelio se nos propone el engreimiento del ser humano.
Pero las proposiciones contenidas en la Palabra de Dios son para todos los tiempos. Y la Palabra nos aconseja reconocernos incapaces ante el Todopoderoso ... para poder llegar a ser sabios. Hacernos pequeños... necesitados como los niños... para que Dios pueda crecer en nosotros. Hacernos humildes... reconocernos que no somos nada ante Dios ... para poder ser engrandecidos por El. Sólo así, podremos salirnos del grupo de los “sabios y entendidos”, a quienes le quedan escondidos los secretos de Dios y podremos, entonces, ser contados entre la “gente sencilla” a quienes el Padre revela sus secretos, los secretos de su Sabiduría.