El tiempo de Dios no es el tiempo del hombre. A veces para entender esta sencilla verdad necesitamos pasar por el valle de la aflicción y el dolor, a donde en muchas ocasiones somos conducidos por nuestra propia necedad.
"Los ojos de todos esperan en ti, y tú les das su comida a su tiempo" Sal.145:15
Si, Dios sabe cual es el momento ideal y perfecto para darnos todas las cosas que necesitamos. Lo malo es que los seres humanos somos inmediatistas, todo lo queremos aquí y ahora. Nos desesperamos con suma facilidad si aquello que queremos pareciera tardarse en llegar. Un buen empleo, una bella casa, un auto nuevo, un esposo, una esposa, hijos, dinero, etc. La lista es larga.
Es interesante notar que la mayoría de las cosas que más anhelamos son materiales, físicas o tangibles. Es decir, aparte de inmediatistas somos materialistas. Pero nuestro Padre que está en los Cielos sabe cuáles son nuestras necesidades reales, y estas abarcan mucho más de lo meramente físico o tangible, porque aunque nos cueste reconocerlo también somos seres espirituales y como tales, tenemos necesidades espirituales.
No desesperemos, tenemos un Dios Todopoderoso presto para darnos nuestro alimento (espiritual y material) a su tiempo. El tiempo perfecto de Dios.
Que Dios los Bendiga.
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